Canales en Amsterdam
¿Qué sería de Roma sin el Coliseo? ¿Y de Ámsterdam sin canales? Sin duda lo más destacable de Ámsterdam es su gran sistema fluvial, históricamente mucho mayor que el de Venecia.
La longitud total del sistema de canales de Ámsterdam es de 75 kilómetros y da origen a más de 1000 puentes. En los canales viven miles de familias en las más de 2.500 casas flotantes.
Como curiosidad, las cámaras acorazadas del Banco Nacional de Holanda se encuentran en la profundidad de los canales. En caso de alarma, una inundación acabará con la amenaza.
Grachtengordel

Los tres canales que lo componen se denominan, de fuera a dentro, Prinsengracht, Keizersgratch y Herengracht. El canal más llamativo de los tres es el menor, Herengracht, en sus orillas encontraréis algunas de las mansiones más bonitas de la ciudad.
Paseo en barco por los canales
Algo siempre recomendable para cualquier viajero es apreciar Ámsterdam desde el agua. Encontraréis diversas empresas que realizan diferentes tipos de cruceros por los canales. Los precios de los paseos más baratos comienzan en 10€.
Casas Flotantes en Ámsterdam

Esta curiosa forma de alojarse surgió tras la Segunda Guerra Mundial debido a la escasez de viviendas. También contribuyó a ello el hecho de que en esos años se modernizara la flota holandesa y cientos de barcos cargueros quedaran disponibles para poder ser utilizados como vivienda.
En un primer momento los habitantes de estas improvisadas casas de los canales fueron los hippies.
¿Cuánto cuesta una casa flotante?
Los precios de estas casas son algo más bajos que los de las casas tradicionales pero conllevan más gastos de mantenimiento. Cada tres o cuatro años los propietarios deben llevar el barco al astillero para que le hagan una revisión completa, algo que suele durar cerca de una semana.
Aparte de los gastos de mantenimiento, las habitantes de los barcos vivienda deben pagar un alquiler por el estacionamiento del barco, unos impuestos especiales y un seguro también más caro que el de una casa normal.
Ni un hueco
Actualmente los canales de Ámsterdam están completamente saturados y, aunque quisiérais comprar un barco y estacionarle en ellos, ya no queda espacio donde instalarse.
Siempre podéis comprar un barco ya establecido.
Houseboat Museum

En esta casa museo podréis caminar por su amplio salón, imaginaros cocinando o ver las minúsculas camitas donde dormían sus antiguos visitantes. Os entregarán un folleto traducido al español, donde se exponen datos interesantes sobre la vida en los canales.
Coffee Shops

En la mayor parte de los coffee shops no venden bebidas alcohólicas y, lo que es más sorprendente aún, aunque fumar hachís y marihuana está legalizado, en ellos no está permitido fumar tabaco.
El consumo y la venta de las denominadas "drogas duras" tampoco está permitido en los coffee shops.
No sólo para fumadores
En los coffee shops de Ámsterdam podréis consumir Marihuana de múltiples formas: tomándola en forma de té, fumándola en pipas de agua e incluso se pueden encontrar magdalenas y pastelitos también hechos a base de Cannabis.
Aunque el humo es inevitable, si queréis entrar pero no queréis tomar ninguna droga, podréis tomar un café o cualquier otra bebida.
Una especie en extinción
De los casi 1000 coffee shops que había en Ámsterdam hace 10 años, en la actualidad se pueden contar menos de 300 debido a la presión que ejercen los países vecinos y a la del propio gobierno holandés para reducir este tipo de turismo.
Por si algún viajero están pensando en ir a Amsterdan, aquí presento varias ofertas: